martes, 2 de septiembre de 2014

Fuentes de energía asociadas a la Geología

FUENTES DE ENERGÍA.









JULIÁN RICARDO ZAPATA ROZO (2142170)
NEDYS TAVERA SÁNCHEZ (2140110)







UNIVERSIDAD INDUSTRIAL DE SANTANDER
ESCUELA DE GEOLOGÍA
INTRODUCCIÓN A GEOCIENCIAS
BUCARAMANGA, SANTANDER
2014



FUENTES DE ENERGÍA.



JULIÁN RICARDO ZAPATA ROZO (2142170)
NEDYS TAVERA SANCHEZ (2140110)




TRABAJO PRESENTADO A:
GEÓLOGO AMBIENTAL JAVIER ENRIQUE PEÑA MANOSALVA
DOCENTE




UNIVERSIDAD INDUSTRIAL DE SANTANDER
ESCUELA DE GEOLOGÍA
GRUPO P43
INTRODUCCIÓN A GEOCIENCIAS
BUCARAMANGA, SANTANDER
2014



INTRODUCCIÓN



El siguiente trabajo fue elaborado con fines académicos tras una rigurosa consulta y compilación de información de distintas fuentes; corresponde a la sustentación de las exposiciones asignadas un vez terminado el capítulo de rocas ígneas.
El tema a tratar es Fuentes de Energía, enfocándonos en qué son cada una, su origen, forma de aprovechamiento, usos y rocas asociadas.  El trabajo cuenta con una estructura de presentación para su fácil comprensión, además cuenta con algunas imágenes ilustrativas y videos sobre algunos procesos que se describen.
A lo largo del trabajo veremos que la principal forma de aprovechar energía es por obtención de energía calórica para producir vapor de agua y que este mueva una turbina que a su vez alimenta a un generador eléctrico y así se genere energía eléctrica. Tal es el caso de la energía nuclear, combustibles fósiles e incluso la geotermia. (Para el caso de la hidráulica se aprovecha es el movimiento o caída del agua). Basados en esto, este sería el esquema de una central térmica (que presenta un serio problema: las mejores turbinas no son capaces de transformar ni la mitad de la energía, es decir, entre el paso de la energía calórica a la energía eléctrica se pierde la mitad y en ocasiones, se aprovecha un 30% o menos).




EL CARBÓN
Datos básicos
¿Qué es?
El carbón o carbón mineral es una roca sedimentaria organoclástica de color negro, muy rica en carbono y con cantidades variables de otros elementos, principalmente hidrógeno, azufre, oxígeno y nitrógeno, utilizada como combustible fósil. La mayor parte del carbón se formó durante el período Carbonífero (hace 359 a 299 millones de años).
Las rocas asociadas al carbón son principalmente pizarras arcillosas, aunque también son comunes las areniscas, y las calizas de grano fino constituyen también una parte importante de las formaciones marinas.
Origen:
En eras geológicas remotas, y sobre todo en el periodo carbonífero (que comenzó hace 362,5 millones de años), grandes extensiones del planeta estaban cubiertas por una vegetación abundantísima que crecía en pantanos. Al morir las plantas, quedaban sumergidas por el agua y se producía la descomposición anaeróbica de la materia orgánica. Debido a la acción de las bacterias anaeróbicas, la materia orgánica fue ganando carbono y perdiendo oxígeno e hidrógeno, y se formaron las turberas( La formación de turba constituye la primera etapa del proceso por el que la vegetación se transforma en carbón); este proceso, unido a los incrementos de presión por las capas superiores, así como los movimientos de la corteza terrestre y, en ocasiones, el calor volcánico, comprimieron y endurecieron los depósitos con el paso del tiempo, y provocaron cambios físicos y químicos en los restos orgánicos.
La materia vegetal inicial se transforma en turba (perdiendo agua y gases).  Cuando las turberas se hunden, el aumento de presión y temperatura expulsan  más agua y gases (O2 y N2), formándose el lignito y los carbones pardos.  Mayores presiones y temperatura eliminan más gases transformando el  carbón pardo en carbón bituminoso hulla). La fase final de comprensión y  expulsión de gases da lugar a la antracita, de gran poder calorífico pero difícil  de arder. La mayor parte del carbón se produjo hace 300 millones de años, en el período carbonífero, cuando se depositó en forma de turba el 80% del carbón natural actual a lo largo de un extenso cinturón que atraviesa Norteamérica, Europa, Rusia y China (también, en menor medida, Sudáfrica y Australia).
 Las vetas oscilan entre 0,6 y 2,5 m de espesor, a profundidades entre 12 y 50 ó más metros, aunque hay algunos puntos en que han aflorado. Los lignitos proceden de carbonizaciones de 50 millones de años, y los principales yacimientos se encuentran en Canadá, México y Alemania.


La composición de los diferentes carbones es la siguiente (partiendo de la composición de la madera:    
     Potencial Enegético:
     


Formas de aprovechamiento:
Desde el punto de vista energético el carbón se aprovecha para producir calor (quemándolo, es decir, haciendo que reaccione con el oxígeno del aire) y con él, evaporar agua para mover una turbina, transformándola en energía mecánica y ésta, posteriormente, en eléctrica. También se emplea su energía para fundir el mineral de hierro en los altos hornos y para obtener diversos productos en la industria química. (También existen procedimientos para convertir el carbón en combustibles líquidos y gaseosos).
Es la mayor fuente de combustible usada para la generación de energía eléctrica. Más de la mitad de la producción total de carbón a nivel mundial, provee actualmente cerca del 40% de la electricidad producida mundialmente. Muchos países son altamente dependientes del carbón para su electricidad; El carbón es también indispensable para la producción de hierro y acero; casi el 70% de la producción de acero proviene de hierro hecho en altos hornos, los cuales utilizan carbón y coque.. La mayoría de las plantas de cemento del mundo son alimentadas con carbón
El carbón se utiliza en la industria siderúrgica, como coque, la industria metalúrgica, los sistemas de calefacción central, la producción de gas y otros combustibles sintéticos y en las centrales carboeléctricas.
Los carbones bituminosos son coquizables, es decir, que mediante un proceso de destilación se elimina la materia volátil del carbón, quedando un carbón de muy buena calidad que se denomina coque y que es de gran utilidad en la industria siderúrgica (producción de hierro y acero, este último es precisamente una aleación de hierro y carbono) y metalúrgica.
Los carbones subituminosos, llamados de flama larga por la forma en que se realiza la combustión, no se pueden transformar en coque y se utilizan en las centrales carboeléctricas
Todos los tipos de carbón tienen alguna utilidad. La turba se utiliza desde hace siglos como combustible para fuegos abiertos, y más recientemente se han fabricado briquetas de turba y lignito para quemarlas en hornos. La siderurgia emplea carbón metalúrgico o coque, un combustible destilado que es casi carbono puro. El proceso de producción de coque proporciona muchos productos químicos secundarios, como el alquitrán de hulla, que se emplean para fabricar otros productos. El carbón también se utilizó desde principios del siglo XIX hasta la II Guerra Mundial para producir combustibles gaseosos, o para fabricar productos petroleros mediante licuefacción. La fabricación de combustibles gaseosos y otros productos a partir del carbón disminuyó al crecer la disponibilidad del gas natural. En la década de 1980, sin embargo, las naciones industrializadas volvieron a interesarse por la gasificación y por nuevas tecnologías limpias de carbón. La licuefacción del carbón cubre todas las necesidades de petróleo de Suráfrica.
Ciertos productos de la combustión del carbón pueden tener efectos perjudiciales sobre el medio ambiente.
Duración prevista:
En conjunto, a este ritmo de producción las reservas globales se agotarían en 204 años. Obviamente, en la medida que el carbón  (licuado o gasificado) sustituya al petróleo y  al gas, estas reservas sufrirán una drástica  disminución. En este caso, actuales recursos podrían pasar a la consideración de reservas, si económica y  técnicamente fuera factible.
El proceso productivo
El proceso productivo encaminado al empleo del carbón como fuente de energía primaria comprende las siguientes fases: Extracción del material en la mina (laboreo), transporte del carbón en bruto hasta pie de central; procesado del carbón hasta convertirlo en un polvo fino; combustión del carbón en una caldera para su conversión en calor (vapor de agua recalentado y a alta presión); conversión del vapor en energía mecánica por medio de una turbina; conversión de la energía mecánica en energía eléctrica por medio de un generador eléctrico; transporte de la electricidad producida al exterior (energía final) El proceso incluye también la eliminación de algunos residuos de la combustión, como son las cenizas y algunos volátiles.
Para utilizar la energía atrapada en el carbón para producir electricidad, se pulveriza y quema en hornos que calientan estanques de agua que es transformada en vapor. Este vapor es posteriormente utilizado para hacer girar turbinas conectadas a generadores de electricidad. En el proceso se pierde la mayor parte de la energía del carbón como calor. Las turbinas más eficientes construidas actualmente son capaces de transformar sólo el 35% de en electricidad, el 65% restante se pierde, se habla de una eficiencia energética del 35%, en las turbinas más antiguas es de un 30% o menos. Las centrales eléctricas obtienen unos 2 kWh por kilógramo de carbón. Como quemar 1 kg de carbón produce 1,83 kg de CO2, podemos afirmar que por cada kwh estas centrales producen 0,915 kg de CO2 (0,254 kg CO2/MJ). El petróleo genera 890 g CO2/kWh y el gas natural 600 g CO2/kWh. Las emisiones de las centrales nucleares, plantas hidroeléctricas y de energía eólica son del orden de las 6 g CO2/kWh.
Inconvenientes:
El carbón es el más sucio de todos los combustibles ya que genera la mayor cantidad de CO2 por kilo quemado. No sólo produce CO2, sino también grandes cantidades de dióxido de sulfuro (SO2). El carbón reacciona también con el nitrógeno e hidrógeno del aire para formar HCN y nitrato de sulfuro (SNO3), elementos muy tóxicos.  Su combustión también genera lluvia ácida de dos formas, tanto por el SO2 que reacciona con el oxígeno del aire para formar SO3, que a su vez reacciona con las moléculas de agua en la atmósfera para formar ácido sulfúrico, como cuando las moléculas de CO2 reaccionan con el agua para formar ácido carbónico (h5CO3). Aunque es posible reducir el SO2 en la planta, el ácido carbónico es mucho más difícil de prevenir.
Existen tecnologías “limpias” para la explotación del carbón, pero usarlas baja la rentabilidad por lo que la industria no suelen usarlas tanto.
El coque: es un combustible sólido formado por la destilación de carbón bituminoso calentado a temperaturas de 500 a 1100 °C sin contacto con el aire.1 2 3 El proceso de destilación implica que el carbón se limpia de alquitrán, gases y agua.3 Este combustible o residuo se compone en 90 a 95% de carbono.
EL PETRÓLEO
El producto es un compuesto químico complejo en el que coexisten partes sólidas, líquidas y gaseosas. Lo forman, por una parte, unos compuestos denominados hidrocarburos, formados por átomos de carbono e hidrógeno y, por otra, pequeñas proporciones de nitrógeno, azufre, oxígeno y algunos metales. Se presenta de forma natural en depósitos de roca sedimentaria y sólo en lugares en los que hubo mar.
Su color es variable, entre el ámbar y el negro y el significado etimológico de la palabra petróleo es aceite de piedra, por tener la textura de un aceite y    1 encontrarse en yacimientos de roca sedimentaria.
Origen: los restos de animales y plantas, cubiertos por arcilla y tierra durante muchos millones de años sometidos por tanto a grandes presiones y altas temperaturas, junto con la acción de bacterias anaerobias provocan la formación del petróleo. El hecho de que su origen sea  muy diverso, provoca que su presencia sea también muy variada: líquido, dentro de rocas porosas y entre los huecos de las piedras; volátil, es decir, un líquido que se vuelve gas al contacto con el aire; semisólido, con textura de ceras.

Localización: al ser un compuesto líquido, su presencia no se localiza habitualmente en el lugar en el que se generó, sino que ha sufrido previamente un movimiento vertical o lateral, filtrándose a través de rocas porosas, a veces una distancia considerable, hasta encontrar una salida al exterior en cuyo caso parte se evapora y parte se oxida al contactar con el aire, con lo cual el petróleo en sí desaparece o hasta encontrar una roca no porosa que le impide la salida. Entonces se habla de  yacimientos.
NOTA: El petróleo no forma lagos subterráneos; siempre aparece impregnado en rocas porosas.
Estratigráficos: En forma de cuña alargada que se inserta entre dos estratos.
Anticlinal: En un repliegue del subsuelo, que almacena el petróleo en el arqueamiento del terreno.
Falla: Cuando el terreno se fractura, los estratos que antes coincidían se separan. Si el estrato que contenía petróleo encuentra entonces una roca no porosa, se forma la bolsa o yacimiento.
En las últimas décadas se ha desarrollado enormemente la búsqueda de yacimientos bajo el mar, los cuales, si bien tienen similares características que los terrestres en cuanto a estructura de las bolsas, presentan muchas mayores dificultades a la hora de su localización y, por añadidura, de su explotación.

El petróleo no se encuentra distribuido de manera uniforme en el subsuelo hay que tener presencia de al menos cuatro condiciones básicas para que éste se acumule:
Debe existir una roca permeable de forma tal que bajo presión el petróleo pueda moverse a través de los poros microscópicos de la roca.
La presencia de una roca impermeable, que evite la fuga del aceite y gas hacia la superficie.
El yacimiento debe comportarse como una trampa, ya que las rocas impermeables deben encontrarse dispuestas de tal forma que no existan movimientos laterales de fuga de hidrocarburos.
Debe existir material orgánico suficiente y necesario para convertirse en petróleo por el efecto de la presión y temperatura que predomine en el yacimiento.
La búsqueda de petróleo o gas se enfrenta con el hecho de que la superficie de la tierra tiene una historia complicada. Los geo científicos saben que parte de la corteza terrestre, que abarcan continentes y océanos, se han trasladado con relación a otras. Cuando los continentes se separaron, zonas que eran tierra quedaron sumergidas por el mar: esas zonas se convirtieron en lugares de deposición de rocas sedimentarias. Al producirse colisiones las enormes fuerzas originadas levantaron cadenas de montañas, estrujaron las rocas en plegamientos y las echaron unas sobre otras, para formar estructuras complejas. Algunas de éstas son favorables para la acumulación de petróleo.
Una de las estructuras más comunes es el anticlinal, cuyas capas forman un arco hacia arriba o en forma convexa, con las capas antiguas cubiertas por las más recientes y se estrechan con la profundidad. Debajo del anticlinal, puede encontrarse un yacimiento de hidrocarburos, sellado por una capa impermeable. Si se perfora un pozo a través de esta cubierta, hasta llegar al yacimiento, se puede sacar petróleo a la superficie.
Fig.2.- Trampas estratigráficas: lentes de arena donde el petróleo se encuentra impregnado entre los granos (poros). Estos lentes se encuentran rodeados por material impermeable que actúa como roca sello.
Fig.3.- Trampas estructurales: responde a fractura, fallamiento donde se desplaza un bloque respecto del otro, y a plegamiento. El petróleo se acumula en los laterales de la falla y en la cresta de los pliegues.

El petróleo no suele encontrarse en el lugar en el que se genera. La generación de petróleo se produce a partir de la materia orgánica que se encuentra en sedimentos de grano fino, como arcillas; a estos sedimentos se les llama rocas madre. Posteriormente el petróleo se traslada a sedimentos de grano más grueso, como areniscas, por medio de un  proceso llamado migración; A veces el petróleo no encuentra obstáculos en su migración, por lo que sale o brota, a la superficie como un manantial (así el Hombre conoció la existencia de petróleo) o bien queda entrampado. Las trampas son sitios del subsuelo donde existen condiciones adecuadas para que se acumulen los hidrocarburos, éstas se caracterizan por la presencia de rocas porosas y permeables conocidas como rocas almacén o reservorios, donde se acumulan o almacenan los hidrocarburos bordeados de capas de rocas impermeables o rocas sello que impiden su migración.
Existen dos tipos de migración: primaria, desde la roca madre al almacén, y secundaria, dentro de la roca almacén. Mientras que la migración primaria se produce siempre a través de cortas distancia, la secundaria se puede dar a distancias muy largas.
Los reservorios tienen tres propiedades cuyo conocimiento resultan fundamentales para conseguir el máximo rendimiento en la exploración y producción de hidrocarburos.
Les principales ruacas sedimentaríais en la cuales se encuentra petróleo en la naturaleza son: arenas, areniscas, calizas y dolomitas. Las arcillas y arcillolitas son impermeables estas son rocas de sello.
Porosidad
La porosidad es la medida de los espacios huecos en una roca, y resulta fundamental para que ésta actúe como almacén:
Porosidad = % (
volumen de huecos / volumen total) x 100
 La porosidad se expresa como ø. Casi todos los almacenes tienen un ø entre 5% y 30%, y la mayoría entre 10% y 20%.
Existen varios tipos de porosidad según la conexión de sus poros:
Conectada: poros conectados por un solo lado.
Interconectada: poros conectados por varios lados. Las corrientes de agua pueden desalojar el gas y el petróleo
Aislada: poros aislados.

Los poros conectados e interconectados constituyen la porosidad efectiva.

Permeabilidad
Es el segundo factor importante para la existencia de un almacén. La permeabilidad (k) es la capacidad de una roca para que un fluido fluya a través de ella y se mide en darcys, que es la permeabilidad que permite a un fluido de un centipoise de viscosidad fluir a una velocidad de 1 cm/s a una presión de 1 atm/cm. Habitualmente, debido a la baja permeabilidad de las rocas, se usan los milidarcies.
La ley de Darcy sólo es válida cuando no hay reacciones química entre el fluido y la roca, y cuando hay una sola fase rellenando los poros.
La permeabilidad media de los almacenes varía entre 5 y 500 milidarcies, aunque hay depósitos de hasta 3.000 - 4.000 milidarcies.
Para ser comercial, el petróleo debe fluir a varias decenas de milidarcies.

Saturación de hidrocarburos
Debido a ciertas propiedades de los fluidos y de las rocas almacén o reservorios, es común que al menos una parte del espacio poral esté ocupado por agua. La saturación de hidrocarburos expresa el porcentaje del espacio poral que está ocupado por petróleo o gas natural.
En términos geológicos, las capas subterráneas se llaman "formaciones" y están debidamente identificadas por edad, nombre y tipo del material rocoso del cual se formaron. Esto ayuda a identificar los mantos que contienen las ansiadas rocas sedimentarias.
Las "cuencas sedimentarias" son cubetas rellenas de sedimentos, que son las únicas rocas donde se pueden generar hidrocarburos (conforme a la teoría de Engler) y donde en general se acumulan. En pocos casos se dan acumulaciones de petróleo y gas en rocas graníticas. El tamaño de estas cubetas varía en decenas de miles de kilómetros cuadrados, y el espesor generalmente es de miles de metros, alcanzando hasta 7.000 metros. Estas cubetas se encuentran rodeadas por zonas de basamento (que rara vez contienen petróleo).

TIPOS DE PETRÓLEO
Son miles los compuestos químicos que constituyen el petróleo, y, entre muchas otras propiedades, estos compuestos se diferencian por su volatilidad (dependiendo de la temperatura de ebullición). Al calentarse el petróleo, se evaporan preferentemente los compuestos ligeros (de estructura química sencilla y bajo peso molecular), de tal manera que conforme aumenta la temperatura, los componentes más pesados van incorporándose al vapor.
Las curvas de destilación 
 (del inglés "true , temperatura de ebullición real) distinguen a los diferentes tipos de petróleo y definen los rendimientos que se pueden obtener de los productos por separación directa.
La industria mundial de hidrocarburos líquidos clasifica el petróleo de acuerdo a su densidad API (parámetro internacional del Instituto Americano del Petróleo, que diferencia las calidades del crudo).
Aceite Crudo
Densidad
( g/ cm3)
Densidad
grados API
Extrapesado
>1.0
10.0
Pesado
1.0 - 0.92
10.0 - 22.3
Mediano
0.92 - 0.87
22.3 - 31.1
Ligero
0.87 - 0.83
31.1 – 39
Súperligero
< 0.83
> 39

Para descubrir los lugares donde existen yacimientos de petróleo no existe un método científico exacto, sino que es preciso realizar multitud de tareas previas de estudio del terreno. Los métodos empleados, dependiendo del tipo de terreno, serán geológicos o geofísicos.

MÉTODOS GEOLÓGICOS
El primer objetivo es encontrar una roca que se haya formado en un medio propicio para la existencia del petróleo, es decir, suficientemente porosa y con la estructura geológica de estratos adecuada para que puedan existir bolsas de petróleo.
Hay que buscar, luego, una cuenca sedimentaria que pueda poseer materia orgánica enterrada hace más de diez millones de años.
Para todo ello, se realizan estudios geológicos de la superficie, se recogen muestras de terreno, se inspecciona con Rayos X, se perfora para estudiar los estratos y, finalmente, con todos esos datos se realiza la carta geológica de la región que se estudia.
Tras nuevos estudios "sobre el terreno" que determinan si hay rocas petrolíferas alcanzables mediante prospección, la profundidad a la que habría que perforar, etc., se puede llegar ya a la conclusión de si merece la pena o no realizar un pozo-testigo o pozo de exploración. De hecho, únicamente en uno de cada diez pozos exploratorios se llega a descubrir petróleo y sólo dos de cada cien dan resultados que permiten su explotación de forma rentable.

MÉTODOS GEOFÍSICOS
Cuando el terreno no presenta una estructura igual en su superficie que en el subsuelo (por ejemplo, en desiertos, en selvas o en zonas pantanosas), los métodos geológicos de estudio de la superficie no resultan útiles, por lo cual hay que emplear la Geofísica, ciencia que estudia las características del subsuelo sin tener en cuenta las de la superficie.
Aparatos como el gravímetro permiten estudiar las rocas que hay en el subsuelo. Este aparato mide las diferencias de la fuerza de la gravedad en las diferentes zonas de suelo, lo que permite determinar qué tipo de roca existe en el subsuelo.
Con los datos obtenidos se elabora un "mapa" del subsuelo que permitirá determinar en qué zonas es más probable que pueda existir petróleo.
También se emplea el magnetómetro, aparato que detecta la disposición interna de los estratos y de los tipos de roca gracias al estudio de los campos magnéticos que se crean.
Igualmente se utilizan técnicas de prospección sísmica, que estudian las ondas de sonido, su reflexión y su refracción, datos éstos que permiten determinar la composición de las rocas del subsuelo. Así, mediante una explosión, se crea artificialmente una onda sísmica que atraviesa diversos terrenos, que es refractada (desviada) por algunos tipos de roca y que es reflejada (devuelta) por otros y todo ello a diversas velocidades. Estas ondas son medidas en la superficie por sismógrafos.
Más recientemente, las técnicas sísmicas tridimensionales de alta resolución permiten obtener imágenes del subsuelo en su posición real, incluso en situaciones estructurales complejas. Pero, con todo, la presencia de petróleo no está demostrada hasta que no se procede a la perforación de un pozo.


El proceso de perforación
El proceso de perforación de pozos petroleros y de gas natural se realiza en las etapas de exploración y desarrollo, de lo que la industria petrolera se conoce como upstream. La extracción es una actividad de la última etapa del upstream, denominada producción.
Si la presión de los fluidos es suficiente, forzará la salida natural del petróleo a través del pozo que se conecta mediante una red de oleoducto hacia su tratamiento primario, donde se deshidrata y estabiliza eliminando los compuestos más volátiles. Posteriormente se transporta a refinerías o plantas de mejoramiento. Durante la vida del yacimiento, la presión descenderá y será necesario usar otras técnicas para la extracción del petróleo. Esas técnicas incluyen la extracción mediante bombas, la inyección de agua o la inyección de gas, entre otras.
El refinado de petróleo
El petróleo es una mezcla de productos que para poder ser utilizado en las diferentes industrias y en los motores de combustión debe sufrir una serie de tratamientos diversos. Muy a menudo la calidad de un Petróleo crudo depende en gran medida de su origen. En función de dicho origen sus características varían: color, viscosidad, contenido. Por ello, el crudo a pie de pozo no puede ser utilizado tal cual. Se hace, por tanto, indispensable la utilización de diferentes procesos de tratamiento y transformación para la obtención del mayor número de productos de alto valor comercial. El conjunto de estos tratamientos constituyen el proceso de refino o refinación del petróleo.
Destilación fraccionada del petróleo

El petróleo natural no se usa como se extrae de la naturaleza, sino que se separa en mezclas más simples de hidrocarburos que tienen usos específicos, a este proceso se le conoce como destilación fraccionada. El petróleo natural hirviente (unos 400 grados Celsius) se introduce a la parte baja de la torre, todas las sustancias que se evaporan a esa temperatura pasan como vapores a la cámara superior algo más fría y en ella se condensan las fracciones más pesadas que corresponden a los aceites lubricantes. De este proceso se obtienen las fracciones:

·         Gases: metano, etano y gases licuados del petróleo (propano y butano)
·         Nafta, ligroína o éter de petróleo
·         Gasolina
·         Queroseno
·         Gasóleo (ligero y pesado)
·         Fuelóleo
·         Aceites lubricantes
·         Asfalto
·         Alquitrán
Los componentes químicos del petróleo se separan y obtienen por destilación mediante un proceso de refinamiento. De él se extraen diferentes productos, entre otros: propano, butano, gasolina, queroseno, gasóleo, aceites lubricantes, asfaltos, carbón de coque, etc. Todos estos productos, de baja solubilidad, se obtienen en el orden indicado, de arriba abajo, en las torres de fraccionamiento.

GAS NATURAL.
¿Qué es?
El gas natural es un compuesto no tóxico, incoloro e inodoro, constituido por una mezcla de hidrocarburos en la que su principal componente es el metano (CH4). Su composición química, no obstante, varía sensiblemente según su procedencia, ya que acostumbra a ir asociada a otras moléculas o elementos como el ácido sulfhídrico (H2S), el anhídrido carbónico (CO2),  el nitrógeno (N2) o el helio (He) que se extrae cuando el gas natural se destina a usos industriales y domésticos. Se encuentra formando «bolsas» en el interior de la Tierra, a veces sólo y a veces en compañía de petróleo.
Origen:
El origen del gas natural, como el del petróleo, lo debemos buscar en los procesos de descomposición  de la materia orgánica, que tuvieron lugar entre 240 y 70 millones de años atrás, durante la época en la que los grandes reptiles y los dinosaurios habitaban el planeta (Era del Mesozoico). Esta materia orgánica provenía  de organismos planctónicos que se fueron acumulando en el fondo marino de plataformas costeras o en las cuencas poco profundas de estanques, y que fueron enterradas bajo sucesivas capas de tierra por la acción de los fenómenos naturales.
Así, sus compuestos fundamentales –grasas y proteínas– se descompusieron muy lentamente en ausencia de oxígeno por la actuación bacteriana.  Los gases generados, por diferencia de presiones, ascendieron por las rocas porosas de la corteza terrestre hasta llegar a capas de terreno impermeable, bajo las  que quedaron atrapados originando las grandes bolsas  o yacimientos de los que hoy en día sacamos provecho los humanos.
Este proceso es, salvando las distancias, parecido al que tiene lugar en los vertederos donde tiramos las basuras. La materia orgánica que proviene de los restos de fruta, verdura o carne, por ejemplo, cuando se descompone, produce un gas de características similares al gas natural, que debe ser evacuado del vertedero a la atmósfera, mediante una red de tubos de drenaje para evitar que  las emanaciones puedan provocar alguna explosión,  o bien almacenarse y aprovecharse como combustible: es el denominado biogás.
Propiedades.
El gas natural cuenta con un poder calorífico de 9.300 Kcal/m3 y el gas licuado 22.400 Kcal/m3. Es un energético altamente deseable, por ser un combustible relativamente limpio, con menos polución que otros combustibles fósiles. Sin embargo, ha sido el combustible con las proyecciones más inexactas, con el error promedio más alto en: consumo, producción y precios; que  los otros combustibles. No tiene olor ni color. El gas natural como cualquier otro combustible produce CO2; sin embargo, debido a la alta proporción de hidrógeno-carbono de sus moléculas, sus emisiones son unos 40-50% menores de las del carbón y unos 25-30% menores de las del fuel-oil. Los óxidos de nitrógeno se producen en la combustión al combinarse radicales de nitrógeno, procedentes del propio combustible o bien, del propio aire, con el oxígeno de la combustión. Este fenómeno tiene lugar en reacciones de elevada temperatura, especialmente procesos industriales y en motores alternativos, alcanzándole proporciones del 95-98% de NO y del 2-5% de NO2. Dichos óxidos, por su carácter ácido contribuyen, junto con el SO2 a la lluvia ácida y a la formación del "smog" (término anglosajón que se refiere a la mezcla de humedad y humo que se produce en invierno sobre las grandes ciudades). La propia composición del gas natural genera dos veces menos emisiones de NOx que el carbón y 2,5 veces menos que el fuel-oil. Las modernas instalaciones tienen a reducir las emisiones actuando sobre la temperatura, concentración de nitrógeno y tiempos de residencia o eliminándolo una vez formado mediante dispositivos de reducción catalítica. Se trata del principal causante de la lluvia ácida, que a su vez es el responsable de la destrucción de los bosques y la acidificación de los lagos. El gas natural tiene un contenido en azufre inferior a las 10ppm (partes por millón) en forma de odorizante, por lo que la emisión de SO2 en su combustión es 150 veces menor a la del gas-oil, entre 70 y 1.500 veces menor que la del carbón y 2.500 veces menor que la que emite el fuel-oil. El gas natural se caracteriza por la ausencia de cualquier tipo de impurezas y residuos, lo que descarta cualquier emisión de partículas sólidas, hollines, humos, etc. y además permite, en muchos casos el uso de los gases de combustión de forma directa (cogeneración) o el empleo en motores de combustión interna.
Generación de electricidad:
Además de ser aprovechado en los hogares para cocina y la calefacción, el gas natural sirve para generar electricidad. El gas natural ha sido un combustible atractivo para la obtención de electricidad, ya que tiene un mejor rendimiento energético y un menor impacto ambiental que otros combustibles fósiles. El desarrollo y mejora de las turbinas de gas permite conseguir ahorros de hasta  un 40%. Hay tres sistemas de producción de energía eléctrica que tienen el gas natural como combustible: 
·         Las centrales térmicas convencionales, que generan electricidad mediante un sistema caldera-turbina de vapor con un rendimiento global de un 33%.
·         Las centrales de cogeneración termoeléctrica, en las  que se obtiene calor y electricidad aprovechando el calor residual de los motores y las turbinas. El calor producido sirve para generar calefacción y aire acondicionado o para calentar agua sanitaria, y la electricidad se utiliza o se envía a la red eléctrica general. Su rendimiento eléctrico depende de la tecnología utilizada, pero puede oscilar entre el 30  y el 40%, mientras que el rendimiento térmico está alrededor del 55%.
·         Las centrales de ciclo combinado (CCGT), que combinan una turbina de gas y una turbina de vapor,  y tienen un rendimiento global de un 57% respecto  a la energía primaria.
Las propiedades físico-químicas del metano hacen de este gas un excelente combustible, debido a su bajo índice de contaminación atmosférica, y al bajo impacto acústico de los motores. En forma de gas natural comprimido (GNC), el metano se ha utilizado en numerosas experiencias que han demostrado su viabilidad como alternativa a los combustibles fósiles tradicionales.
La prospección y la extracción
No existe indicio alguno en la superficie de un suelo que revele la presencia de un yacimiento de gas natural o de petróleo bajo tierra. No obstante, el profundo conocimiento sobre la estructura del suelo que los geólogos y geofísicos han acumulado a lo largo de años de experiencia les permite desestimar rápidamente ciertos lugares y centrar sus estudios en aquellos que presentan unas determinadas características topográficas. Ahora bien, cuando se detecta la presencia de una bolsa de gas natural, hay que continuar la recopilación de datos para decidir si se explota o no el yacimiento: la profundidad en la que se encuentra, su volumen aproximado, las características de los estratos situados encima, etc. Mediante una sonda instalada en una estructura metálica en forma de torre se accede a la bolsa,  se determina también su composición química y la presión del gas y, si definitivamente se considera que el yacimiento será rentable, el pozo se pone en explotación. Cuando el gas no está mezclado con petróleo, los trabajos de explotación se simplifican ya que el producto brota de forma natural y no es necesario elevarlo mecánicamente a la superficie. A veces, se puede haber acumulado agua en los pozos, de manera que hay que extraerlo con bombas para mantener una producción óptima. Los trabajos de exploración y extracción incluyen actividades que pueden resultar perturbadoras para la fauna y la flora. El impacto ambiental de estos trabajos, no obstante, está limitado temporalmente ya que se adoptan medidas de prevención y corrección que restituyen el entorno a su estado natural. Cuando un yacimiento de gas natural se da por agotado, se procede al desmantelamiento de las plataformas, a su retirada y al sellado del pozo, o son empleados como almacenamientos naturales de gas.
Video de cómo localizar petróleo y gas: https://www.youtube.com/watch?v=1LFCiADthiE
Tipo de yacimientos
El gas natural puede encontrarse en la naturaleza en yacimientos de diferente tipo, por lo que las condiciones de explotación de este varían de acuerdo con su origen:
·         Yacimientos de gas puro, donde su composición es básicamente metano, con propiedades físicas que permiten su utilización sin someterse a mayores procesos de tratamiento y separación.
·         Yacimientos donde el gas se encuentre con petróleo; hay tres tipos diferentes de estos:
1.          En capas, en este tipo el gas se encuentra separado del petróleo dentro del mismo yacimiento, con la conveniencia fundamental de iniciar primero la explotación del petróleo y luego el gas, especialmente si las reservas de petróleo son considerables.
2.          Asociado, en el cual el gas se encuentra disuelto en el petróleo, en este tipo de yacimiento se producen los dos hidrocarburos simultáneamente, separándose en la superficie.
3.          Condensado, el gas natural se encuentra con hidrocarburos livianos sometidos a grandes   presiones, por lo que se pueden presentar en fase líquida a condiciones de yacimiento. En este tipo, la explotación debe ser muy cuidadosa para poder obtener la máxima recuperación de     petróleo. En algunos casos se produce para extraer las porciones líquidas procediéndose luego a inyectar el gas seco, con el fin de mantener la presión.

Proceso de licuefacción del Gas Licuado del Petróleo
El gas natural que se envía a plantas de proceso está constituido por metano, etano, propano, butano e hidrocarburos más pesados, así como por impurezas tales como el azufre. En una primera etapa la corriente de gas natural pasa a una planta endulzadora, donde se elimina el azufre. Enseguida, se alimenta a una planta criogénica, en la cual mediante enfriamiento y expansiones sucesivas se obtienen dos corrientes, una gaseosa básicamente formada por metano (gas residual) y la otra líquida (licuables).  En un proceso posterior de fraccionamiento, la fase líquida se separa en diversos componentes: etano, gas LP y gasolina naturales.
Gas No Asociado: El gas no asociado es el gas que se encuentra en los reservorios que no contienen cantidades significativas de petróleo crudo. A menudo se produce a mayor profundidad, donde el calor ha dividido los hidrocarburos en moléculas de gas más pequeñas y ligeras. El gas de esquisto es un tipo de gas no convencional no asociado.
Gas Asociado: El gas asociado se encuentra acompañado del petróleo crudo, disuelto en el crudo o como un ‘tapón’ de gas libre por encima del yacimiento de petróleo. Cuando no se puede utilizar, el gas asociado se reinyecta en el pozo, se quema en antorcha o se arroja a la atmósfera.
El gas licuado del petróleo (GLP): es la mezcla de gases licuados presentes en el gas natural o los disueltos en el petróleo. Los componentes del GLP, aunque a temperatura y presión ambientales son gases, son fáciles de licuar, de ahí su nombre. En la práctica, se puede decir que los GLP son una mezcla de propano y butano.
ENERGÍA NUCLEAR.
¿Qué es?
Video de fision y fusión nuclear:
La energía nuclear es la energía que se obtiene al manipular la estructura interna de los átomos. Se puede obtener mediante la división del núcleo (fisión nuclear) o la unión de dos átomos (fusión nuclear). La energía nuclear se utiliza principalmente para producir energía eléctrica. Generalmente, esta energía (que se obtiene en forma de calor) se aprovecha para generar energía eléctrica en las centrales nucleares, aunque se puede utilizar en muchas otras aplicaciones.
La energía nuclear es la energía en el núcleo de un átomo. Los átomos son las partículas más pequeñas en que se puede dividir un material. En el núcleo de cada átomo hay dos tipos de partículas (neutrones y protones) que se mantienen unidas. La energía nuclear es la energía que mantiene unidos neutrones y protones. La energía nuclear se puede utilizar para producir electricidad. Pero primero la energía debe ser liberada. Ésta energía se puede obtener de dos formas: fusión nuclear y fisión nuclear. En la fusión nuclear, la energía se libera cuando los átomos se combinan o se fusionan entre sí para formar un átomo más grande. Así es como el Sol produce energía. En la fisión nuclear, los átomos se separan para formar átomos más pequeños, liberando energía. Las centrales nucleares utilizan la fisión nuclear para producir electricidad.
Cuando se produce una de estas dos reacciones físicas (la fisión nuclear o la fusión nuclear) los átomos experimentan una ligera pérdida de masa. Esta masa que se pierde se convierte en una gran cantidad de energía calorífica como descubrió el Albert Einstein con su famosa ecuación E=mc2. Aunque la producción de energía eléctrica es la utilidad más habitual que se le da a la energía nuclear, tambíen se puede aplicar en muchos otros sectores, como en aplicaciones médicas, medioambientales o bélicas.
Cómo funciona: Video ilustrativo. https://www.youtube.com/watch?v=4_Jd4l0ptYA
Fisión nuclear
Para poder obtener energía manipulando los núcleos de uno o varios átomos podemos hacerlo de dos formas distintas. Uniendo núcleos de átomos distintos (entonces hablamos de fusión nuclear) o partiendo núcleos de un determinado átomo (caso de la fisión nuclear)
En energía nuclear llamamos fisión nuclear a la división del núcleo de un átomo. El núcleo se convierte en diversos fragmentos con una masa casi igual a la mitad de la masa original más dos o tres neutrones.
La suma de las masas de estos fragmentos es menor que la masa original. Esta 'falta' de masas (alrededor del 0,1 por ciento de la masa original) se ha convertido en energía según la ecuación de Einstein (E=mc2). En esta ecuación E corresponde a la energía obtenida, m a la masa de la que hablamos y c es una constante, la de la velocidad de la luz: 299.792.458 m/s2.
La fisión nuclear puede ocurrir cuando un núcleo de un átomo pesado captura un neutrón (fisión inducida), o puede ocurrir espontáneamente debido a la inestabilidad del isótopo (fisión espontánea).
Reacciones nucleares en cadena:
Una reacción en cadena es un proceso mediante el cual los neutrones que se han liberado en una primera fisión nuclear producen una fisión adicional en al menos un núcleo más. Este núcleo, a su vez produce neutrones, y el proceso se repite. Estas reacciones en cadena pueden ser controladas o incontroladas. Las reacciones controladas serían las reacciones nucleares producidas en centrales nucleares en que el objetivo es generar energía eléctrica de forma constante. Las reacciones nucleares incontroladas se dan en el caso de armas nucleares.  Si en cada fisión provocada por un neutrón se liberan dos neutrones más, entonces el número de fisiones se duplica en cada generación. En este caso, en 10 generaciones hay 1.024 fisiones y en 80 generaciones aproximadamente 6 x 1023 fisiones.

Masa crítica
La masa crítica es la cantidad mínima de material fisionable para que se mantenga una reacción nuclear en cadena. Aunque en cada fisión nuclear  se producen entre dos y tres neutrones, no todos neutrones están disponibles para continuar con la reacción de fisión; algunos se pierden. Si los neutrones liberados por cada reacción nuclear se pierden a un ritmo más rápido de lo que se forman por la fisión, la reacción en cadena no será autosostenible y se detendrá. La cantidad de masa crítica de un material fisionable depende de varios factores: propiedades físicas, propiedades nucleares, de su geometría y de su pureza. Una esfera tiene la superficie mínima posible para una masa dada, y por tanto, reduce al mínimo la fuga de neutrones. Si además bordeamos el material fisionable con un reflector de neutrones se pierden muchos menos neutrones y se reduce la masa crítica.
La fisión nuclear controlada
Esquema sobre cómo se controlan los neutrones liberados para controlar la reacción de fisión en cadena  Para mantener un control sostenido de reacción nuclear, por cada 2 o 3 neutrones puestos en libertad, sólo a uno se le debe permitir dar a otro núcleo de uranio. Si esta relación es inferior a uno entonces la reacción va a morir, y si es más grande va a crecer sin control (una explosión atómica). Para controlar la cantidad de neutrones libres en el espacio de reacción debe estar presente un elemento de absorción de neutrones. La mayoría de los reactores son controlados por medio de barras de control hechas de neutrones de un fuerte material absorbente, como el boro o el cadmio.
Además de la necesidad de capturar neutrones, los neutrones a menudo tienen mucha energía cinética (se mueven a gran velocidad). Estos neutrones rápidos se reducen a través del uso de un moderador, como el agua pesada y el agua corriente. Algunos reactores utilizan grafito como moderador, pero este diseño tiene varios problemas. Una vez que los neutrones rápidos se han desacelerado, son más propensos a producir más fisiones nucleares o ser absorbidos por las barra de control.
Fisión nuclear espontánea
En este tipo de reacciones no es necesaria la absorción de un neutrón exterior. En determinados isótopos del uranio, y sobre todo del plutonio, tienen una estructura atómica tan inestable que se fisiona espontáneamente. La tasa de la fisión nuclear espontánea es la probabilidad por segundo que un átomo dado se fisione de forma espontánea - es decir, sin ninguna intervención externa. El plutonio 239 tiene una muy alta tasa de fisión espontánea en comparación con la tasa de fisión espontánea de uranio 235.
Fusión nuclear.
En la fusión se aplica energía a el núcleo de dos átomos pequeños como el hidrogeno por ejemplo para que al momento de estar en contacto se unan y al unirse desprendan energía de sus núcleos formando un átomo mas grande como podría ser  Helio, y por ser un átomo de gas noble o inerte sería un fuente de energía limpia, porque en este caso sí se sabe que se obtendrá, y no hay desecho radiactivos, lo malo que este fuente es muchísimo más cara que la fisión.
La fusión nuclear es una reacción nuclear en la que dos núcleos de átomos ligeros, en general el hidrógeno y sus isótopos (deuterio y tritio), se unen para formar otro núcleo más pesado. Generalmente esta unión va acompañada con la emisión de partículas (en el caso de núcleos atómicos de deuterio se emite un neutrón). Esta reacción de fusión nuclear libera o absorbe una gran cantidad de energía en forma de rayos gamma y también de energía cinética de las partículas emitidas. Esta gran cantidad de energía permite a la materia entrar en estado de plasma.
Las reacciones de fusión nuclear pueden emitir o absorber energía. Si los núcleos que se van a fusionar tienen menor masa que el hierro se libera energía. Por el contrario, si los núcleos atómicos que se fusionan son más pesados que el hierro la reacción nuclear absorbe energía.
No confundir la fusión nuclear con la fusión del núcleo de un reactor, que se refiere a la fusión del núcleo del reactor de una central nuclear debido al sobrecalentamiento producido por la deficiente refrigeración. Durante el accidente nuclear de Fukushima, se utilizaba esta expresión frecuentemente.
Combustible utilizado para las reacciones de fusión nuclear
Para las reacciones de fusión nuclear se necesitan núcleos ligeros. Básicamente se utilizan deuterio y Tritio, que son dos isótopos del hidrógeno.
El Deuterio es un isótopo estable del hidrógeno formado por un protón y un neutrón. Su abundancia en el agua es de un átomo por cada 6.500 átomos de hidrógeno. Esto supone que en el agua de mar hay una concentración de 34 gramos de deuterio por metro cúbico de agua. El contenido energético del deuterio es tan elevado que la energía que se puede obtener del deuterio de un litro de agua de mar es equivalente a la energía que se puede obtener de 250 litros de petróleo. Por este motivo, teniendo en cuenta, que tres cuartas partes del Planeta están cubiertas por agua, se considera la fusión  nuclear cómo una fuente de energía inagotable.
El otro elemento empleado en la fusión nuclear, el Tritio, es el isótopo inestable o radiactivo del átomo de hidrógeno. Está compuesto por un protón y dos neutrones y se desintegra por emisión beta con relativa rapidez. Aunque el Tritio es escaso en la naturaleza, se puede generar por reacciones de captura neutrónica con los isótopos del Litio. El Litio es un material abundante en la corteza terrestre y en el agua del mar. 
Funcionamiento de una central de energía nuclear:
El principal uso que se le da actualmente a la energía nuclear es el de la generación de energía eléctrica. Las centrales nucleares son las instalaciones encargadas de este proceso.
Prácticamente todas las centrales nucleares en producción utilizan la fisión nuclear ya que la fusión nuclear actualmente es inviable a pesar de estar en proceso de desarrollo. El funcionamiento de una central nuclear es idéntico al de una central térmica que funcione con carbón, petróleo o gas excepto en la forma de proporcionar calor al agua para convertirla en vapor. En el caso de los reactores nucleares este calor se obtiene mediante las reacciones de fisión de los átomos del combustible.
A nivel mundial el 90% de los reactores de potencia, es decir, los reactores destinados a la producción de energía eléctrica son reactores de agua ligera (en las versiones de agua a presión o de agua en ebullición). De modo que explicaremos más extensamente el funcionamiento de este tipo de reactor.
El principio básico del funcionamiento de una central nuclear se basa en la obtención de energía calorífica mediante la fisión nuclear del núcleo de los átomos del combustible. Con esta energía calorífica, que tenemos en forma de vapor de agua, la convertiremos en energía mecánica en una turbina y, finalmente, convertiremos la energía mecánica en energía eléctrica mediante un generador.
El reactor nuclear es el encargado de provocar y controlar estas fisiones atómicas que generarán una gran cantidad de calor. Con este calor se calienta agua para convertirla en vapor a alta presión y temperatura.
El agua transformada en vapor sale del edificio de contención debido a la alta presión a que está sometido hasta llegar a la turbina y hacerla girar. En este momento parte de la energía calorífica del vapor se transforma en energía cinética. Esta turbina está conectada a un generador eléctrico mediante el cual se transformará la energía cinética en energía eléctrica.
Por otra parte, el vapor de agua que salió de la turbina, aunque ha perdido energía calorífica sigue estando en estado gas y muy caliente. Para reutilizar esta agua hay refrigerarla antes de volverla a introducir en el circuito. Para ello, una vez ha salido de la turbina, el vapor entra en un tanque (depósito de condensación) donde este se enfría al estar en contacto con las tuberías de agua fría. El vapor de agua se vuelve líquido y mediante una bomba se redirige nuevamente al reactor nuclear para volver a repetir el ciclo.
Por este motivo las centrales nucleares siempre están instaladas cerca de una fuente abundante de agua fría (mar, río, lago), para aprovechar esta agua en el depósito de condensación. La columna de humo blanco que se puede ver saliendo de determinadas centrales es el vapor de agua que se provoca cuando se este intercambio de calor.
Ventajas de la energía nuclear
Generar energía eléctrica mediante la energía nuclear supone un importante ahorro de emisiones de gases contaminantes (CO2 y otros) que serían generados si esta energía fuese generada a partir de la quema de combustibles fósiles.
Actualmente se consumen más combustibles fósiles de los que se producen de modo que en un futuro no muy lejano estos recursos se agotarían o el precio subiría tanto que serían inaccesibles para la mayoría de la población.

Otra ventaja está en la cantidad de combustible necesario; con poca cantidad de combustible se obtienen grandes cantidades de energía. Esto supone un ahorro en materia prima pero también en transportes, extracción y manipulación del combustible nuclear. El coste del combustible supone el 20% del coste de la energía generada.
La producción de energía eléctrica es continua. Una central nuclear está generando energía eléctrica durante prácticamente un 90% de las horas del año. Esto reduce la volatilidad en los precios que hay en otros combustibles como el petróleo. El hecho que sea continua también favorece a la planificación eléctrica ya que no se tiene tanta dependencia de aspectos naturales. Con esto se solventa el gran inconveniente de las energías renovables en que los horas de sol o de viento no siempre coinciden con las horas de más demanda energética.
Al ser una alternativa a los combustibles fósiles no se necesita consumir tanta cantidad de combustibles como el carbón o el petróleo, de forma que en consecuencia se reduce el problema del calentamiento global, el cual, se cree que tiene una influencia más que importante con el cambio climático del planeta. Al reducir el consumo de combustibles fósiles también mejoraría la calidad del aire que respiramos con lo que ello implicaría en el descenso de enfermedades y calidad de vida.
Inconvenientes de la energía nuclear
Una de las ventajas comentadas anteriormente y los organismos a favor de la energía nuclear utilizan asiduamente es la reducción del consumo de los combustibles fósiles y, por lo tanto, la reducción del calentamiento global. Ésta es una verdad a medias. Si bien es cierto, hoy en día sólo se usa la energía nuclear para generar energía eléctrica. Sí que se reduciría el consumo de los combustibles fósiles, pero sólo de los que se consumen para generar energía eléctrica. La gran parte de consumo de combustibles fósiles proviene del transporte por carretera, de su uso en los motores térmicos (automóviles de gasoil, gasolina… etc.). El uso de la energía nuclear para convertirla en energía mecánica es muy bajo.
El principal inconveniente y lo que la hace más peligrosa es que seguridad en su uso recae sobre la responsabilidad de las personas. Aunque hay muchos sistemas de seguridad automatizados en las centrales nucleares, las personas pueden tomar decisiones equivocadas o irresponsables. Una sucesión de decisiones equivocadas provocó el peor accidente nuclear en Chernobyl. Una vez se ha producido un accidente, la forma en cómo se gestiona también depende de las decisiones que toman las personas que están en el cargo. En este caso el ejemplo lo tenemos con el accidente nuclear de Fukushima en que se cuestionó la gestión del accidente.
Probablemente el inconveniente más alarmante sea el uso que se le puede dar a la energía nuclear en la industria militar. Curiosamente, la energía nuclear debutó ante el mundo en forma de dos bombas lanzadas sobre Japón al fin de la Segunda Guerra Mundial.
A nivel civil, un gran inconveniente es la generación de residuos nucleares y la dificultad para gestionarlos ya que tardan muchísimos años en perder su radioactividad y peligrosidad.
Los reactores nucleares, una vez construidos, tienen fecha de caducidad. Pasada esta fecha deben desmantelarse, de modo que en los principales países de producción de energía nuclear para mantener constante el número de reactores operativos deberían construirse aproximadamente 80 nuevos reactores nucleares  en los próximos diez años.
Debido precisamente a que las centrales nucleares tienen una vida limitada. La inversión para la construcción de una planta nuclear es muy elevada y hay que recuperarla en muy poco tiempo, de modo que esto hace subir el coste de la energía eléctrica generada. En otras palabras, la energía generada es barata comparada con los costes del combustible, pero el tener que amortizar la construcción de la planta nuclear la encarece sensiblemente.
Las centrales nucleares son objetivo para las organizaciones terroristas.
Genera dependencia del exterior. Poco países disponen de minas de uranio y no todos los países disponen de tecnología nuclear, por lo que tienen que contratar ambas cosas en el extranjero.
Los reactores nucleares actuales funcionan mediante reacciones nucleares por fisión. Estas reacciones se producen en cadena de modo que si los sistemas de control fallasen cada vez se producirían más y más reacciones hasta provocar una explosión radiactiva que sería prácticamente imposible de contener.
Ventajas de la fusión nuclear frente a la fisión nuclear
Actualmente la generación de energía eléctrica en los reactores nucleares se realiza mediante reacciones de fisión nuclear.
 La fusión nuclear, por el momento, no es aplicable para generar energía eléctrica. Está en vía de desarrollo, pero si la fusión nuclear fuera practicable, ofrecería las grandes ventajas respecto a la fisión nuclear:
·         Obtendríamos una fuente de combustible prácticamente inagotable.
·         Evitaríamos accidentes en el reactor por las reacciones en cadena que se producen en las fisiones.
·         Los residuos generados son mucho menos radiactivos.
Por otra parte, la energía nuclear de fusión es inviable debido a la dificultad para calentar el gas a temperaturas tan altas y para mantener un número suficiente de núcleos durante un tiempo suficiente para obtener una energía liberada superior a la necesaria para calentar y retener el gas resulta altamente costoso.
Radioactividad: consiste en la emisión espontánea de partículas (alfa, beta, neutrón) o radiaciones (gamma, captura K), o de ambas a la vez, procedentes de la desintegración de determinados nucleidos que las forman, por causa de un arreglo de su estructura interna.
Explotaciones de uranio
El uranio es un elemento raro en la Tierra. Su concentración media en la corteza terrestre es de unas 2 partes por millón. No obstante, en rocas ígneas ricas en sílice, como los granitos, la concentración puede llegar a superar las 100 ppm. Quizás los yacimientos más reseñables sean los de origen detrítico; es decir, los granos de uranio fueron erosionados en su lugar de origen y arrastrados posteriormente por corrientes de agua para depositarse en una cuenca. De este tipo son los de Witwatersrand en la República de Sudáfrica, que es además la región con mayor producción de oro del mundo, o los de Blind River en Canadá.
La explotación de estos minerales se hace por medio de minería a cielo abierto o en minería de interior mediante galerías. Debido a que la concentración de uranio es tan escasa, se necesita mover gran cantidad de material en los depósitos para llegar al mineral, creándose enormes escombreras de estériles.
Rocas o minerales asociados: La principal mena de uranio es la uraninita. Aunque básicamente el uranio está en toda la corteza terreste, pero con 2 o 3 ppm. También se extrae Torio 232 de la torina, para, luego de un proceso, obtener Uranio 233.
Exploración Geológica. Los yacimientos de uranio pueden ser clasificados en varios tipos. De ellos los cinco que han dado lugar a mayores minas son:
-       Yacimientos o acumulaciones en contactos o discordancias. Los yacimientos más importantes de este tipo son los encontrados en el Athabasca en Canadá, que ha dado lugar a las minas más ricas del mundo (con contenidos superiores al 10%), como las de Cigar Lake y Rabit Lale.
-       Yacimientos en areniscas. Yacimientos de estas características son los encontrados en las antiguas repúblicas de la Unión Soviética de Kazajstán y Uzbekistán.
-       Yacimientos en brechas ricas en hematíes. El más importante ha dado lugar a la Mina de Olympic Dam (Australia).
-       Conglomerados de cantos de cuarzo. Un caso típico es el de los yacimientos de Witwatersrand en Sudáfrica.
-       Filones o brechas mineralizadas.
En la naturaleza encontramos aprox. Un 1% de U-235 y un 99% de U-238. Mientras el primero es directamente fisible, el segundo degenera naturalmente en Pu-239 que debe ser bombardeado con neutrones en el núcleo para hacerlo a su vez también fisible. Estos son los dos minerales más usados como base del combustible nuclear, ya sea para uso militar o civil, aunque también puede usarse Torio que tras varios procesos y partiendo de Th-232 da como resultado Uranio-233 que es más eficiente, aunque no todos los reactores nucleares están preparados para su uso.
Los métodos de extracción del mineral son los normales para cualquier actividad minera, así hay minas a cielo abierto y otras convencionales bajo tierra. Sin embargo los precios actuales del uranio son muy bajos, rondando los US$ 10 por libra de U-238, por lo que los gastos operativos de las minas han de ser muy bajos para obtener rentabilidad, u obtenerse como subproducto de otras minas como las de fosfatos.
Las cantidades de producto que se obtienen de unos yacimientos a otros varía considerablemente según el yacimiento, estando entre el 0.07% (España) al 11% (Canadá) de U3O8, esto es que por cada 1.000 Kg. de mineral extraído solo se obtienen de 7 a 110 Kg  de uranio, y de esta cantidad después de todo el proceso de refinado una mínima parte es usado.
GEOTERMIA
¿Qué es?
Para mayor ampliación:

La energía geotérmica es una fuente de energía “renovable” que aprovecha el calor que existe en el subsuelo de nuestro planeta. Sus principales aplicaciones se dan en nuestra vida cotidiana: climatizar y obtener agua caliente sanitaria de manera ecológica tanto en grandes edificios (oficinas, fábricas, hospitales, etc.) como en viviendas.
La geotermia provecha el calor del subsuelo para climatizar y obtener agua caliente sanitaria de forma ecológica. Aunque es una de las fuentes de energía renovable menos conocidas, sus efectos son espectaculares de admirar en la naturaleza. Seguro que todos podemos recordar imágenes del volcán Etna en Sicilia en plena erupción, hemos probado alguna vez los efectos relajantes de las aguas termales o bien admirado fumarolas y géiseres, como los del parque de Timanfaya en Lanzarote, por ejemplo.¿Qué es la energía geotérmica? ¿Qué aplicaciones tiene la energía geotérmica? Se trata de una energía considerada limpia, renovable y altamente eficiente, aplicable tanto en grandes edificios -hospitales, fábricas, oficinas, etc.-, en viviendas e incluso en inmuebles ya construidos.
¿Cómo se forma?
La corteza terrestre no es lisa, está dividida en ocho grandes placas y más de 20 placas más pequeñas que se mueven y empujan unas a otras lentamente, a unos 5 a 10 centímetros al año, que es más o menos a la misma velocidad con que crecen tus uñas.
Cuando las placas se juntan, una puede deslizarse bajo la otra, permitiendo la generación de magma que, en ocasiones, puede llegar a la superficie generando volcanes. En la mayoría de los casos, el magma no sale al exterior, pero es capaz de calentar grandes zonas subterráneas.
Esta fuente de calor, el magma, es uno de los principales elementos de un sistema geotermal, pero hacen falta dos más para generar un reservorio: un acuífero y un sello. El acuífero es una formación rocosa permeable, es decir, que permite que el agua u otros fluidos las traspasen. Y el sello, es otra capa de rocas, pero impermeable. Estos tres elementos deben ir montados uno sobre el otro, la fuente de calor, encima el acuífero y sobre ellos, la tapa. Es como una olla a presión.
Entonces, imagina esto. Llueve. El agua se desliza por la superficie terrestre y penetra hacia el subsuelo a través de las fallas y rocas fracturadas, que funcionan como verdaderas cañerías. El agua queda atrapada en los acuíferos, por donde va circulando y calentándose, pero no puede salir al exterior en su totalidad, porque está cubierta por una capa de roca impermeable que le impide su paso. Cuando estas condiciones se dan, estamos frente a un reservorio geotermal.
Los geiseres y las aguas termales son algunos ejemplos de lo que sucede cuando parte de estas aguas calientes o vapor salen a la superficie. Al igual que en nuestra olla, es posible que parte del vapor se escape de la tapa, aunque a temperaturas muchísimo más altas, superior a los 150°C, y eso los convierte en una enorme fuente de energía.  En algunas ocasiones, no existen fuentes de agua natural (como lluvia o nieve) para generar este circuito. En ese caso, se puede inyectar el agua de forma artificial, y el fenómeno que se producirá es el mismo.
En algunos lugares se dan otras condiciones especiales como son capas rocosas porosas y capas rocosas impermeables que atrapan agua y vapor de agua a altas temperaturas y presión y que impiden que éstos salgan a la superficie. Si se combinan estas condiciones se produce un yacimiento geotérmico. La geotermia es una fuente de energía renovable ligada a volcanes, géiseres, aguas termales y zonas tectónicas geológicamente recientes, es decir, con actividad en los últimos diez o veinte mil años en la corteza terrestre. “La actividad volcánica sirve como mecanismo de transporte de masa y energía desde las profundidades terrestres hasta la superficie”. Se relaciona con dos tipos de recursos explotables por el ser humano: la energía geotérmica y algunos tipos de yacimientos minerales, que son depósitos de origen magmático e hidrotermal.
¿Cómo se aprovecha?
Si bien las fuentes aprovechables de geotermia son más abundantes en algunas partes del mundo que en otras, esto no impide que actualmente se utilice como fuente de energía renovable en muchos países del mundo, en un conjunto de aplicaciones diversas. Esta fuente de energía se puede utilizar tanto para suministrar calor como para generar electricidad. Normalmente, estas tecnologías disponibles se dividen en tres categorías: las centrales geotérmicas, las aplicaciones de uso directo y las bombas de calor geotérmicas.
Las centrales geotérmicas generan electricidad a partir de la perforación de pozos, de un kilómetro o más de profundidad, para explotar depósitos subterráneos geotérmicos, de vapor de agua y agua muy caliente. En la actualidad, funcionan tres tipos de centrales de generación eléctrica:
      Centrales de vapor: utilizan el vapor geotérmico directamente para hacer girar las turbinas de la central.
      Centrales de transmisión de vapor: reservas geotérmicas que producen agua caliente. Se aprovecha la parte que se convierte en vapor al llegar a la superficie.
      Centrales de ciclo binario: utilizan el agua subterránea para transferir el calor a un segundo líquido que tiene una temperatura de evaporación más baja. Cuando este líquido se evapora mueve las turbinas. Posteriormente se condensa este vapor y se reutiliza el líquido de nuevo.
Este último sistema, en comparación con los otras, es el que tiene más perspectivas de futuro. No emite ningún tipo de gases, puesto que es un ciclo cerrado, y funciona con temperaturas interiores de 100 a 150ºC.
Los recursos geotérmicos de alta temperatura (más de 100-150º C) se utilizan para generar energía eléctrica, mientras que aquellos con temperaturas menores son óptimos para los sectores industrial, servicios y residencial. El Instituto Geotérmico de Nueva Zelanda, dependiente de la Universidad de Auckland, es pionero en la investigación geotérmica y en el desarrollo de tecnología para aprovechar esa energía. Fue creado en 1978, a petición de las Naciones Unidas en el marco de su Programa de Desarrollo, ante la necesidad de un centro que pudiese formar a nuevos expertos en energía geotérmica procedentes de otros países.
La energía geotérmica de alta temperatura existe en las zonas activas de la corteza terrestre (zonas volcánicas, límites de placas litosféricas, dorsales oceánicas). A partir de acuíferos cuya temperatura está comprendida entre 150 y 400 ºC, se produce vapor en la superficie que enviando a las turbinas, genera electricidad. Se requieren varios parámetros para que exista un campo geotérmico : un techo compuesto de un cobertura de rocas impermeables ; un deposito, o acuífero, de permeabilidad elevada, ente 300 y 2000m de profundidad ; rocas fracturadas que permitan una circulación convectiva de fluidos, y por lo tanto la trasferencia de calor de la fuente a la superficie, y una fuente de calor magmático (entre 3 y 10 km de profundidad a 500-600 ºC).La explotación de un campo de estas características se hace por medio de perforaciones según técnicas casi idénticas a las de la extracción del petróleo.
La energía geotérmica de temperaturas medias es aquella en que los fluidos de los acuíferos están a temperaturas menos elevadas (70-150ºC). Por consiguiente, la conversión vapor-electricidad se realiza a un menor rendimiento, y debe utilizarse como intermediario un fluido volátil. Pequeñas centrales eléctricas pueden explotar estos recursos.
La energía geotérmica de baja temperatura es aprovechable en zonas más amplias que las anteriores; por ejemplo, en todas las cuencas sedimentarias. Es debida al gradiente geotérmico. Los fluidos están a temperaturas de 60 a 80 C. Se utiliza para la calefacción de las viviendas, principalmente en Islandia y en Francia.
La energía geotérmica de muy baja temperatura se considera cuando los fluidos se calientan a temperaturas comprendidas entre 20 y 60 ºC. Esta energía se utiliza para necesidades domésticas, urbanas o agrícolas (calentamiento de invernaderos, como se utiliza en Hungría).
Colombia y la energía geotérmica
Colombia tiene un tesoro en bruto que explotar. El país cuenta con 13 volcanes activos donde las altas temperaturas que emanan de la tierra suponen un enorme potencial a la hora de desarrollar proyectos de energía geotérmica. Conscientes de ello, los gobiernos de Colombia y Ecuador proponen un proyecto para obtener energía eléctrica a partir de tres volcanes fronterizos: Chiles, Tufiño y Cerro Negro, una iniciativa que podría llegar a producir hasta 150 megavatios de una forma limpia y respetuosa con el medio ambiente.
Además de estos tres volcanes, en Colombia se han identificado otras zonas potenciales, como el volcán Azufral, al sur del país, o el volcán Nevado de Santa Isabel. Uno de los focos más importantes del país se encuentra en los alrededores del volcán Nevado del Ruiz, situado en la Cordillera Central y considerado uno de los más activos del planeta con sus 5.321 metros de altura. Las fuentes termales y fumarolas de su entorno representan una posibilidad real de obtener grandes cantidades de energía geotérmica.
Inconvenientes:
Las plantas de energía geotérmica representan la mayor preocupación en cuanto a energía geotérmica. Un problema: el hundimiento del terreno a medida que el agua o el vapor se extraen inicialmente. Éste puede ser un problema grave. En Wairakei, el terreno descendió cerca de 13 m (42.7 pies) cuando la planta comenzó a funcionar. Esto sigue siendo un tema preocupante en Wairakei. En plantas nuevas, se reinyecta rápidamente agua para mantener los niveles de presión de agua y del depósito subterráneo.
Las plantas de energía geotérmica binaria no emiten ningún gas. Sin embargo, las plantas de vapor seco y por impulso de vapor emiten cantidades relativamente menores de CO2, según el contenido del agua. También se genera un poco de sulfuro de hidrógeno, pero no en cantidades importantes como para contribuir con la lluvia ácida. A causa de los compuestos de azufre disueltos en el agua subterránea, las plantas producen un olor a azufre desagradable para las personas. En Estados Unidos, las plantas de energía geotérmica deben eliminar el sulfuro de hidrógeno, ya sea quemándolo o bien convirtiéndolo en dióxido de azufre. Luego, el dióxido de azufre puede disolverse o convertirse en ácido sulfúrico y venderse. Las sales y los minerales que se eliminan del agua se vuelven a inyectar al depósito de agua subterránea. También se produce un poco de lodo, que ahora se procesa para extraer minerales valiosos.
Tipos de yacimientos geotérmicos
Puede considerarse que hay dos tipos de yacimientos geotérmicos, que se podrían llamar:
      De agua caliente
      Secos
Yacimientos de agua caliente
Estos yacimientos pueden formar una fuente o ser subterráneos, contenidos en un acuífero.
Los que forman fuentes, se aprovechan desde tiempos muy antiguos como baños termales. En principio podrían aprovecharse enfriando el agua antes de utilizarla, pero suelen tener caudales relativamente reducidos.
En cuanto a los subterráneos, yacimientos de aguas termales muy calientes a poca o media profundidad, sirven para aprovechar el calor del interior de la tierra. El agua caliente o el vapor pueden fluir naturalmente, por bombeo o por impulsos de flujos de agua y de vapor. El método a elegir depende del que en cada caso sea económicamente rentable.
En la mayoría de los casos la explotación debe hacerse con dos pozos (o un número par de pozos), de modo que por uno se obtiene el agua caliente y por otro se vuelve a inyectar en el acuífero, tras haber enfriado el caudal obtenido. Las ventajas de este sistema son múltiples:
Hay menos probabilidades de agotar el yacimiento térmico, puesto que el agua reinyectada contiene todavía una importante cantidad de energía térmica.
Tampoco se agota el agua del yacimiento, puesto que la cantidad total se mantiene.
Las posibles sales o emisiones de gases disueltos en el agua no se manifiestan al circular en circuito cerrado por las conducciones, lo que evita contaminaciones.
Finalmente hay otros yacimientos en los que el agua sale en forma de vapor. En éstos, el aprovechamiento es directo para obtener energía mecánica mediante una turbina, pero tienen el problema de que es más complicado reinyectar el agua después de condensada, y en el camino habrán difundido en la atmósfera una parte de los gases que acompañan al vapor.
Yacimientos secos.
En este caso, hay una zona bajo la tierra, a profundidad no excesiva, con materiales o piedras calientes, en seco. Se inyecta agua por una perforación y se recupera, caliente por otra, se aprovecha el calor, por medio de un intercambiador y se vuelve a reinyectar como en el caso anterior.
Un ejemplo, en Inglaterra, fue el “Proyecto de Piedras Calientes HDR” (sigla en inglés: HDR, Hot Dry Rocks), abandonado después de comprobar su inviabilidad económica en 1989. Los programas HDR se están desarrollando en Australia, Francia, Suiza, Alemania. Los recursos de magma (rocas fundidas) ofrecen energía geotérmica de altísima temperatura, pero con la tecnología existente no se pueden aprovechar económicamente esas fuentes.
Extinción del calor.
Así como hay yacimientos geotérmicos capaces de proporcionar energía durante muchas décadas, otros pueden agotarse y enfriarse. En un informe, el gobierno de Islandia dice: debe entenderse que la energía geotérmica no es estrictamente renovable en el mismo sentido que la hidráulica.
ENERGÍA HIDRÁULICA
 Se obtiene del aprovechamiento de las energías cinética y potencial de la corriente del agua, saltos de agua o mareas. Es un tipo de energía  verde cuando su impacto ambiental es mínimo y usa la fuerza hídrica sin represarla; en caso contrario, es considerada solo una forma de energía renovable.
El origen de la energía hidráulica está en el ciclo hidrológico de las lluvias y por tanto, en la evaporación solar y la climatología que remontan grandes cantidades de agua a zonas elevadas de los continentes alimentando los ríos. Este proceso está originado, de manera primaria, por la radiación solar que recibe la Tierra.
Estas características hacen que sea significativa en regiones donde existe una combinación adecuada de lluvias, desniveles geológicos y orografía favorable para la construcción de represas. Es debida a la energía potencial contenida en las masas de agua que transportan los ríos, provenientes de la lluvia y del deshielo. Puede ser utilizada para producir energía eléctrica mediante un salto de agua, como se hace en las centrales hidroeléctricas.
 
La energía hidroeléctrica es una de las más rentables. El costo inicial de construcción es elevado, pero sus gastos de explotación y mantenimiento son relativamente bajos. Las condiciones pluviométricas medias del año deben ser favorables
Análisis para la selección de tipo de presa a construir
  1.- Altura de la presa:
•Menores a 30 metros, el 80% son de presas de tierra.
•Mayores de 150 metros, el 60% son presas de hormigón.
2.- Geomorfología de la cerrada, valles amplios (presas de tierra), valles estrechos (presas de hormigón).
3.- Condiciones geológicas geotécnicas de la cimentación, es decir, cuando el macizo de cimentación es muy deformable (rocas blandas o suelos) o de baja resistencia se construyen presas de tierra.
4.- Disponibilidad de los materiales de construcción.        
•Áridos para las presas de hormigón.
•Materiales sueltos para las presas de tierra: estas están formadas por materiales naturales como graba, arenas, limos, y triturado en general. Se usan los materiales tal y como se encuentran en la naturaleza sin más elaboración artificial que la adicción de agua para la debida compactación 
Toda presa debe ser estable, resistente e impermeable

Las presas se clasifican según la forma de su estructura y los materiales empleados. Las grandes presas pueden ser de hormigón, de este material las más comunes son de gravedad, de bóveda y de contrafuertes.
También hay presas naturales de piedra y tierra.
1. Las presas de gravedad son estructuras de hormigón de sección triangular; la base es ancha y se va estrechando hacia la parte superior; la cara que da al embalse es prácticamente vertical. Vistas desde arriba son rectas o de curva suave. La estabilidad de estas presas radica en su propio peso. Es el tipo de construcción más duradero y el que requiere menor mantenimiento.
2. Las Presas de bóveda utiliza los fundamentos teóricos de la bóveda. La curvatura presenta una convexidad dirigida hacia el embalse, así la carga se distribuye por toda la presa hacia los extremos de las paredes.
En condiciones favorables, esta estructura necesita menos hormigón que la de gravedad, pero es difícil encontrar emplazamientos donde se puedan construir.

3. Las presas de contrafuertes tienen una pared que soporta el agua y una serie de contrafuertes o pilares, de forma triangular, que sujetan la pared y transmiten la carga del agua a la base.
4. Las presas de piedra o tierra y los diques son las estructuras más usadas para contener agua. En su construcción se utiliza desde arcilla hasta grandes piedras. Las presas de tierra y piedra utilizan materiales naturales con la mínima transformación. Éstas presas pueden estar construidas con materiales impermeables en su totalidad, como arcilla, o estar formadas por un núcleo de material impermeable reforzado por los dos lados con materiales más permeables, como arena, grava o roca. El núcleo debe extenderse hasta bastante más abajo de la base para evitar filtraciones

Funcionamiento:
El funcionamiento básico consiste en aprovechar la energía cinética del agua almacenada, de modo que accione las turbinas hidráulicas.
En el aprovechamiento de la energía hidráulica influyen dos factores: el caudal y la altura del salto para aprovechar mejor el agua llevada por los ríos, se construyen presas para regular el caudal en función de la época del año. La presa sirve también para aumentar el salto.

Otra manera de incrementar la altura del salto es derivando el agua por un canal de pendiente pequeña (menor que la del cauce del río), consiguiendo un desnivel mayor entre el canal y el cauce del río.

El agua del canal o de la presa penetra en la tubería donde se efectúa el salto. Su energía potencial se convierte en energía cinética llegando a las salas de máquinas, que albergan a las turbinas hidráulicas y a los generadores eléctricos. El agua al llegar a la turbina la hace girar sobre su eje, que arrastra en su movimiento al  generador eléctrico.
La tecnología de las principales instalaciones se ha mantenido igual durante el siglo XX.
Las turbinas pueden ser de varios tipos, según los tipos de centrales: Pelton (saltos grandes y caudales pequeños), Francis (salto más reducido y mayor caudal), Kaplan (salto muy pequeño y caudal muy grande) y de hélice.
Las centrales dependen de un gran embalse de agua contenido por una presa. El caudal de agua se controla y se puede mantener casi constante. El agua se transporta por unos conductos o tuberías forzadas, controlados con válvulas para adecuar el flujo de agua por las turbinas con respecto a la demanda de electricidad. El agua sale por los canales de descarga.
El agua es devuelta al río en las condiciones en que se tomó, de modo que se puede volver a utilizar por otra central situada aguas abajo o para consumo.
La utilización de presas tiene varios inconvenientes. Muchas veces se inundan terrenos fértiles y en ocasiones poblaciones que es preciso evacuar. La fauna piscícola puede ser alterada si no se toman medidas que la protejan.

 Clasificación
Se pueden clasificar según varios argumentos, como características técnicas, peculiaridades del asentamiento y condiciones de funcionamiento. En primer lugar hay que distinguir las que utilizan el agua según discurre normalmente por el cauce de un río, y aquellas otras a las que ésta llega, convenientemente regulada, desde un lago o pantano. Se denominan: Centrales de Agua Fluente, Centrales de agua embalsada, Centrales de Regulación, Centrales de Bombeo.
Según la altura del salto de agua o desnivel existente: Centrales de Alta Presión, Centrales de Media Presión, Centrales de Baja Presión

Centrales de Regulación:

Prestan un gran servicio en situaciones de bajos caudales, ya que el almacenamiento es continuo, regulando de modo conveniente para la producción. Se adaptan bien para cubrir horas punta de consumo.
Centrales de Agua Fluente: Llamadas también de agua corriente, o de agua fluyente. Se construyen en los lugares en que la energía hidráulica debe ser utilizada en el instante en que se dispone de ella, para accionar las turbinas hidráulicas. No cuentan prácticamente con reserva de agua, oscilando el caudal suministrado según las estaciones del año. En la temporada de precipitaciones abundantes (de aguas altas), desarrollan su potencia máxima, y dejan pasar el agua excedente. Durante la época seca (aguas bajas), la potencia disminuye en función del caudal, llegando a ser casi nulo en algunos ríos en la época del estío. Su construcción se realiza mediante presas sobre el cauce de los ríos, para mantener un desnivel constante en la corriente de agua.
Centrales de agua embalsada: Se alimenta del agua de grandes lagos o de pantanos artificiales (embalses), conseguidos mediante la construcción de presas. El embalse es capaz de almacenar los caudales de los ríos afluentes, llegando a elevados porcentajes de captación de agua en ocasiones. Esta agua es utilizada según la demanda, a través de conductos que la encauzan hacia las turbinas.
Centrales de Bombeo: Se denominan "de acumulación". Acumulan caudal mediante bombeo, con lo que su actuación consiste en acumular energía potencial. Pueden ser de dos tipos, de turbina y bomba, o de turbina reversible. La alimentación del generador que realiza el bombeo desde aguas abajo, se puede realizar desde otra central hidráulica, térmica o nuclear. No es una solución de alto rendimiento, pero se puede admitir como suficientemente rentable, ya que se compensan las pérdidas de agua o combustible.
Centrales de Alta Presión: Aquí se incluyen aquellas centrales en las que el salto hidráulico es superior a los 200 metros de altura. Los caudales desalojados son relativamente pequeños, 20 m3/s por máquina. Situadas en zonas de alta montaña, y aprovechan el agua de torrentes, por medio de conducciones de gran longitud.
Centrales de Media Presión: Aquellas que poseen saltos hidráulicos de entre 200-20 metros aproximadamente. Utilizan caudales de 200m3/s por turbina. En valles de media montaña, dependen de embalses.
Centrales de Baja Presión: Sus saltos hidráulicos son inferiores a 20 metros. Cada máquina se alimenta de un caudal que puede superar los 300m3/s.
Ventajas y aprovechamiento
La energía hidroeléctrica en general, y su uso en particular, presenta ciertas ventajas sobre otras fuentes de energía, como son:
Ø  Principalmente la producción de electricidad
Ø  Disponibilidad: Es un recurso inagotable, en tanto en cuanto el ciclo del agua perdure.
Ø  No contamina" (en la proporción que lo hacen el petróleo, carbón, etc.): Nos referimos a que no emite gases "invernadero" ni provoca lluvia ácida, es decir, no contamina la atmósfera, por lo que no hay que emplear costosos métodos que limpien las emisiones de gases.
Ø  Produce trabajo a la temperatura ambiente: No hay que emplear sistemas de refrigeración o calderas, que consumen energía y, en muchos casos, contaminan, por lo que es más rentable en este aspecto.
Ø  Almacenamiento de agua para regadíos
Ø  Permite realizar actividades de recreo (remo, bañarse, etc.)
Ø  Evita inundaciones por regular el caudal.
LA ENERGIA SOLAR
La energía solar es la energía obtenida directamente del sol. La radiación solar incidente en la tierra puede aprovecharse por su capacidad para calentar o directamente a través del aprovechamiento de la radiación. Este tipo de energía renovable y limpia, es lo que se conoce como energía verde. La potencia de la radiación varía según el momento del día, las condiciones atmosféricas que la amortiguan y la latitud. Tanto la radiación directa como difusa es aprovechable:
Directa: la que llega directamente del foco solar sin reflexiones ni refracciones.
Difusa: la que es emitida por la bóveda celeste diurna, gracias a la reflexión y refracción solar en la atmósfera, en las nubes, y el resto de elementos atmosféricos y terrestres.
Ventajas y desventajas.
Ventajas: se ahorra mucha energía, se reduce la contaminación, es gratis, es una fuente de energía inagotable y limpia.
Desventajas: no siempre puedes contar con ella, como en las noches y días nublados, por lo que hay que acudir a otra fuente de energía. Estos sistemas de energía son difíciles de instalar y caros.
Recogiendo de forma adecuada de la radiación solar, podemos obtener calor y electricidad. El calor se logra mediante los captadores o colectores térmicos, y la electricidad, a través de los llamados módulos fotovoltaicos. Ambos procesos nada tienen que ver entre sí, ni en cuanto a su tecnología ni en cuanto a su aplicación.

Aprovechamiento del calor:
Ø  Obtención de agua caliente para consumo doméstico o industrial
Ø  Para dar calefacción a nuestros hogares, hoteles, colegios, fábricas etc.
Ø  Para calentar piscinas permitiendo el baño durante todo año.
Ø  Las aplicaciones agrícolas son muy amplias: Con invernaderos solares pueden obtenerse mayores y más tempranas cosechas
Ø  Plantas de purificación, desalinización de aguas sin consumir ningún tipo de combustible.
Aprovechamiento de la electricidad:
Ø  Puede utilizarse de manera directa o bien ser almacenada en acumuladores para usarse en las horas nocturnas.
Ø  También es posible inyectar la electricidad generada en la red general, obteniendo un importante beneficio
Aplicaciones:
•          Huerta solar.
•          Central térmica solar, como: la que está en funcionamiento desde el año 2007 en Sanlúcar la Mayor (Sevilla), de 11 MW de potencia que entregará un total de 24 GWh al año y la de Llanos de Calahorra, cerca de Guadix, de 50 MW de potencia. En proyecto Andasol I y II.
•          Potabilización de agua.
•          Cocina solar.
•          Destilación.
•          Evaporación.
•          Fotosíntesis.
•          Secado.
•          Arquitectura sostenible.
•          Cubierta solar.
•          Acondicionamiento y ahorro de energía en edificaciones.
•          Calentamiento de agua.
•          Calefacción doméstica.
•          Iluminación.
•          Refrigeración.
•          Aire acondicionado.
•          Energía para pequeños electrodomésticos.                              
Clasificación por tecnologías y su correspondiente uso más general:
•          Energía solar activa: para uso de baja temperatura (entre 35 °C y 60 °C), se utiliza en casas; de media temperatura, alcanza los 300 °C; y de alta temperatura, llega a alcanzar los 2000 °C. Esta última, se consigue al incidir los rayos solares en espejos, que van dirigidos a un reflector que lleva a los rayos a un punto concreto. También puede ser por centrales de torre y por espejos parabólicos.
•          Energía solar pasiva: Aprovecha el calor del sol sin necesidad de mecanismos o sistemas mecánicos.
•          Energía solar térmica: Es usada para producir agua caliente de baja temperatura para uso sanitario y calefacción.
•          Energía solar fotovoltaica: Es usada para producir electricidad mediante placas de semiconductores que se alteran con la radiación solar.
•          Energía solar termoeléctrica: Es usada para producir electricidad con un ciclo termodinámico convencional a partir de un fluido calentado a alta temperatura (aceite térmico).
ü  Energía solar térmica de baja temperatura

Generación de agua caliente con una instalación de circuito cerrado.

Dos colectores solares planos, instalados en un tejado.
ü  Energía solar térmica de media temperatura

La planta termosolar de 150 MW Andasol es una planta comercial de discos parabólicos, localizada en España. Esta planta utiliza un sistema de tanques con sales fundidas para almacenar el calor generado por la radiación solar de forma que pueda seguir generando electricidad durante la noche. 

Un disco solar parabólico que concentra la radiación solar sobre un elemento calefactor de un motor Stirling.  Toda la unidad actúa como un  seguidor solar.

ü  Energía solar fotovoltaica
Instalación de paneles solares en New Hampshire, Estados Unidos.
Instalación solar fotovoltaica en Oregón, Estados Unidos.
Cuando no hay sol:
Debido a la naturaleza intermitente de la radiación solar como fuente energética, durante los periodos de baja demanda debe almacenarse el sobrante de energía solar para cubrir las necesidades cuando la disponibilidad sea insuficiente. Los acumuladores pueden servir para almacenar el excedente de energía eléctrica producida por dispositivos solares.
ENERGÍA EÓLICA
La energía eólica pertenece al conjunto de las energías renovables o también denominadas energías alternativas. La energía eólica es el tipo de energía renovable más extendida a nivel internacional por potencia instalada (Mw) y por energía generada (Gwh).
La energía eólica procede de la energía del sol (energía solar), ya que son los cambios de presiones y de temperaturas en la atmósfera los que hacen que el aire se ponga en movimiento, provocando el viento, que los aerogeneradores aprovechan para producir energía eléctrica a través del movimiento de sus palas (energía cinética).
Para que la energía eólica se establezca en una localización concreta, mediante parques eólicos, el lugar de instalación debe cumplir una serie de requisitos.
Para empezar a evaluar el terreno donde irán instalados los aerogeneradores, primero hay que realizar una campaña de medición de viento a diferentes alturas (tanto dirección del viento, como velocidad de viento; esto es conocido como la rosa de los vientos) que durará como mínimo un año. De esta manera, se sabrá cómo debe ser la disposición de los aerogeneradores para obtener la mayor energía eólica posible. Además, esta campaña de medición servirá para corroborar que la ubicación es adecuada para instalar un parque eólico.
Los requisitos fundamentales para un emplazamiento son:
  • Más de 2.000 horas de producción eólica equivalente a potencia máxima (horas equivalentes).
  • Respetar la avifauna del entorno, estableciendo si es preciso un paso para aves migratorias entre grupos de aerogeneradores.
  • Lejanía de más de un kilómetro con núcleos urbanos para evitar la contaminación acústica de los parques eólicos.
  • La energía eólica debe estar instalada en suelo no urbanizable, generalmente.
  • No interferencia con señales electromagnéticas del entorno, ya que señales de televisión, radio o telefonía se pueden ver perjudicadas si no se instalan otros dispositivos que lo eviten.
En la actualidad, la energía eólica es utilizada principalmente para producir electricidad mediante aerogeneradores, conectados a las grandes redes de distribución de energía eléctrica. Los parques eólicos construidos en tierra suponen una fuente de energía cada vez más barata, competitiva o incluso más barata en muchas regiones que otras fuentes de energía convencionales.1 2 Pequeñas instalaciones eólicas pueden, por ejemplo, proporcionar electricidad en regiones remotas y aisladas que no tienen acceso a la red eléctrica, al igual que hace la energía solar fotovoltaica.

La energía eólica es un recurso abundante, renovable, limpio y ayuda a disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero al reemplazar fuentes de energía a base de combustibles fósiles, lo que la convierte en un tipo de energía verde. El impacto ambiental de este tipo de energía es además, generalmente, menos problemático que el de otras fuentes de energía.
La energía del viento es bastante estable y predecible a escala anual, aunque presenta significativas variaciones a escalas de tiempo menores. Al incrementarse la proporción de energía eólica producida en una determinada región o país, se hace imprescindible establecer una serie de mejoras en la red eléctrica local.8 9 Diversas técnicas de control energético, como una mayor capacidad de almacenamiento de energía, una distribución geográfica amplia de los aerogeneradores, la disponibilidad de fuentes de energía de respaldo, la posibilidad de exportar o importar energía a regiones vecinas o la reducción de la demanda cuando la producción eólica es menor, pueden ayudar a mitigar en gran medida estos problemas.10 Adicionalmente, la predicción meteorológica permite a los gestores de la red eléctrica estar preparados frente a las previsibles variaciones en la producción eólica que puedan tener lugar a corto plazo.
Cómo se produce y obtiene
La energía del viento está relacionada con el movimiento de las masas de aire que se desplazan de áreas de alta presión atmosférica hacia áreas adyacentes de baja presión, con velocidades proporcionales al gradiente de presión.
Los vientos son generados a causa del calentamiento no uniforme de la superficie terrestre por parte de la radiación solar, entre el 1 y 2 % de la energía proveniente del sol se convierte en viento. De día, las masas de aire sobre los océanos, los mares y los lagos se mantienen frías con relación a las áreas vecinas situadas sobre las masas continentales.
Los continentes absorben una menor cantidad de luz solar, por lo tanto el aire que se encuentra sobre la tierra se expande, y se hace por lo tanto más liviana y se eleva. El aire más frío y más pesado que proviene de los mares, océanos y grandes lagos se pone en movimiento para ocupar el lugar dejado por el aire caliente.










Bibliografía:

Carbón:
Gas:
Energía nuclear:
Geoermia:

  

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